LA ANUNCIACIÓN DEL ANGEL A LA VIRGEN MARIA
SOLEMNIDAD DE LA ANUNCIACIÓN DEL ANGEL A LA B.V. MARIA. (viene del 25 de Marzo)
Lc 1,26-38
Hoy celebramos esta solemnidad que dejamos pausada el 25 de Marzo por ser Semana Santa y posteriormente la semana de la octava pascual.
La Anunciación o Encarnación de N.S. Jesucristo, Dios verdadero, Segunda persona de la Trinidad,en el vientre de la Virgen María.
Este texto lo escuchamos mucho en la Navidad, pero hoy los hacemos de un modo particular y empalmándolo con la Navidad que celebraremos otra vez en nueve meses, el 25 de Diciembre.
Este texto hay que leerlo de rodillas. Comienza con esta visita del Ángel a esa muchacha de Nazareth para anunciarle el plan de salvación de Dios. A esta muchacha única, a Myriam, única porque fue preservada del pecado original y de pecado personal.
Ya había existido una mujer creada sin pecado original, creado de modo inmaculada, esa era Eva. Pero Eva cometió pecado, el primer pecado, sin embargo Eva pecó, y nos arrastró a todos con el pecado original.
María, la Nueva Eva, pudo haber pecado, porque no era un robot. Pero ella se veía como la esclava de Dios, la sierva del Señor. Y hoy aparece el arcángel Gabriel haciéndole esta oferta que de seguro ninguna muchacha se hubiese podido negar, pero.!!! Y aquí está el pero, resulta que María si se pudo haber negado, ¿por qué?
Por qué María le hubiese podido haber dicho al Arcángel: "¡no!, eso no va conmigo, porque yo estoy prometida a un hombre muy celoso llamado José, y no quiero problemas con él; mucho menos con mis padres".
¿Cómo era posible qué élla que no había vivido con José iba a salir embarazada? De hecho fue un conflicto, recordemos que el mismo José decide dejarla en secreto para que no la maten. Pasa que luego Dios preparó también el corazón de este buen hombre.
¿Cómo será eso, pues no conozco varón? La Virgen no está pidiéndo garantía para ella. Está pidiendo garantía para su moral, porque el fin no justifica los medios. Háblame de los medios, porque entonces así sabré si vienes o no vienes de Dios. Es entonces cuando el angel le da explicaciones a la Virgen de parte de Dios.
Y su SI no está buscando recompensa, premios, o algo así. No. Su SI lo pronuncia haciéndose esclava del Señor. Nunca agradeceremos bastante a la Virgen su SI. Ese Si que inicia una nueva creación.
Después de contemplar este misterio tenemos que agradecer, y agradecer con obras. Aprendamos de María la humildad y la confianza. Aprendamos de María el ponernos en Manos de Dios como lo hizo María; salvando las distancias porque no somos inmaculados.
Pero aprendamos de María a cuidar a Jesús en la Eucaristía y en los pobres, a estar con Jesús en la Cruz, digámosle: María tómame de tu mano como hiciste con el apóstol Juan y ayúdame a seguir a tu Hijo con mi cruz de cada día. ¡Qué así sea!